Las personas y entidades abajo firmantes vemos con preocupación cómo nuestras aspiraciones por una cultura de paz chocan constantemente con los esfuerzos por difundir una “cultura de defensa” militar. Nuestra ciudad, nuestra isla y nuestro archipiélago han sido y están siendo objeto de numerosas actividades que entendemos de militarización social. Citamos como ejemplo las numerosas intervenciones de unidades militares en fiestas populares y en eventos deportivos, la organización de maniobras y exhibiciones militares en espacios públicos como la playa de Las Canteras, anacrónicas juras de bandera, desfiles y actos como la celebración del Día de las Fuerzas Armadas, la participación de exhibiciones aéreas con aviones de guerra, prácticas de gestión militarizada de campos de refugiados, o jornadas de puertas abiertas que incitan a las niñas y los niños a percibir las armas como juguetes, cuando estos son sus principales víctimas en las guerras. La realización de
alternativa antimilitarista - moc